Conocemos las diez ventajas del salmorejo, una sencilla sopa fría cargada de grandes beneficios.
Los orígenes del salmorejo son un misterio. Plato típico entre las clases bajas andaluzas, el salmorejo se hacía en principio con pan viejo majado en agua, ajo y sal. Fue más tarde cuando se le incorporó el aceite y el tomate, dando lugar a uno de los platos estrella de nuestra gastronomía.
Las 10 ventajas del salmorejo
1. Es la receta más versátil de nuestra gastronomía. Puede tomarse como entrante, plato principal, segundo plato, guarnición o como salsa.
2. Plato económico, sencillo y cómodo, tanto a la hora de preparar como de conservar.
3. Fuente natural de antioxidantes. El tomate aporta vitamina C y licopeno; el aceite de oliva virgen proporciona polifenoles y vitamina E.
4. Gracias al ajo, posee un efecto vasodilatador que beneficia la circulación, sobre todo en épocas de mucho calor como el verano.
5. Es un cardioprotector natural gracias a los ácidos grasos cardiosaludables que proporciona el aceite de oliva virgen.
6. Nos hallamos ante una receta baja en calorías. Aporta unas 70 kcal por cada 100 ml., con lo que una ración normal de 250 ml. sólo tiene 175 kcal.
7. Mantiene las propiedades nutritivas intactas de los tomates al no necesitar calor para procesarlas, esto es, las vitaminas y los minerales del salmorejo llegan íntegros al organismo.
8. Es un plato muy refrescante que se puede consumir todo el año, ayuda a reponer líquidos e iones como el sodio o el potasio.
9. Si se le añade huevo, contamos con proteínas de alta calidad y vitaminas del grupo B.
10. Si le añadimos jamón serrano, aportamos hierro, proteínas y vitamina B12.