El tomate, alimento cardiovascular que aporta mayor agilidad y resistencia física a quienes lo consumen.
Desde hace tiempo se sabe que puede evitar el cáncer de próstata y las enfermedades cardiovasculares, pero cada vez más estudios amplían sus beneficios. Con gran poder antioxidante y grandes beneficios cardiovasculares, el tomate se sitúa como una de las hortalizas más beneficiosas.
Vitamínico y antioxidante
El tomate es fuente de vitamina C, sólo ingiriendo 100 gr se obtiene el 22% de la dosis diaria recomendada. También es rico en compuestos antioxidantes, los cuales ayudan a mejorar la calidad de la piel y retrasan el envejecimiento. De hecho, se considera uno de los alimentos básicos para evitar el cáncer de próstata.
Contra tumores e infartos
Un reciente estudio afirma que el tomate contiene un gen que puede ayudar a vencer tumores cerebrales. Además, quienes incluyen habitualmente tomate en sus dietas tienen un 50% menos de riesgo de padecer un infarto de miocardio, respecto a quienes no lo toman casi nunca. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el tomate deshidratado duplica su valor nutricional.
Agilidad y resistencia
Además de aportar salud cardiovascular, esta va ligada a una mayor resistencia física, ya que otro reciente estudio ha descubierto que quienes lo consumen habitualmente tienen mayor agilidad y resistencia al hacer todo tipo de actividades.
Rojos y madurados al sol
No todos los tomates aportan los mismos beneficios. Si están verdes es preferible que maduren por contener solanina, una sustancia que puede ser tóxica. Son preferibles aquellos que hayan madurado al sol en lugar de en invernadero, ya que poseen más vitaminas.
Cómo consumirlos
Si deseas que maduren, colócalos dentro de una bolsa de plástico cerrada y si, por el contrario, quieres consumirlos antes de que se estropeen, elabora con ellos salsas, mermeladas o confituras. Si tienes problemas de acidez, es preferible consumir los tomates tipo pera, por tener bastante menos acidez que el resto.
